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Sol, verdor, sudor, lágrimas, pasión. Tantas emociones juntas luego de vivir un partido de tanto trajín, en donde cada pelota se peleó como si fueran víveres para un pobre. Donde por tanta velocidad y vértigo sentimos la impresión de estar subidos en una montaña rusa.
Por una parte los locales y su eufórica barra. Sport Progreso Pumapuquio de color rosado, pero lo que no tiene intensidad de color en su divisa, lo tiene en su juego, donde prima el toque a balón rasante y con hombres hábiles en casi todas las líneas. El Progreso y el órden se notaba en la cancha.
Por otra parte, la visita. Color azul de camiseta. Apoyados por una numerosa barra que fue al frente en todo momento. Con la ventaja de 3-1 en la ida, pero conscientes que no les iba ser fácil plantearon un partido para jugar con cabeza fría. Con una hinchada también fiel e incansable.
EL PRECIO DEL SOL
Los rayos solares de La Molina son agradables para cualquiera. Pasar del frío agobiante de Lima, llegar a Musa y sentir este clima, es grato. Pero no fue así para el arquero Rodolfo Vargas que apenas iniciado el partido se vio sorprendido por un genial bombazo desde la mediacancha de Gavino Quispe (3'). Al meta solo le quedó decir: ¡Rayos! y lamentarse.
Temprano se ponían los de casa en ventaja e iban a la caza de la remontada. Tenían un mundo por jugar.
Y AQUÍ SE VIENE AZUL, AZUL...
Pero el Ascope, y su banca de suplentes donde parecía que dirigían 3 (todos arengaban: kinesiólogo, preparador físico y DT, en una trilogía técnica nunca antes vista) continuaba con ventaja en su poder. Y se mandaron al ataque respondiendo en contragolpes. No pensaban dejarse alcanzar y para ello tenían que correr más, planear la ruta del escape.
Entonces tras una entrada fuerte del Pumapuquio, el arbitro cobró tiro libre. Renzo Angulo Ortiz la colocó –con previo bote que complicó a José Castro– al fondo del arco local (21'). Era más que un gol una dosis que actuaba como calmante en el Ascope. 1-1 y sus goles seguían valiendo oro.
PANTERAS ROSAS
Herido de bala, pero con vida aún, los dirigidos por el 'profe' Alfredo Gutiérrez, se volvieron todas unas fieras y movidos por el orgullo reaccionaron. Con el antecedente del gol que se comió Rodolfo Vargas de Ascope, los remates de afuera eran ya no una posibilidad sino el camino. Lo intentaron en dos ocasiones, pero el arquero se repuso respondiendo y demostrando que no sería tan fácil vencerlo.
Sin embargo, la presión rozaba los límites y el Pumapuquio con jugadas que tenían progreso, ya merecían estar adelante. Así lo entendió Germán Enciso que se deshizo de tres rivales a base de habilidad y metió un centro puñal al área para que el '9' Carlos Peralta (32'), la clave con toda la fe. Bombazo explosivo en La Molina.
GOLPE AVISA
A la visita el golpe lejos de bajonearlo, lo motivó. Era el momento preciso para responder, pensaron. Y tras una jugada de fulbito, le tocó el ocho al local. Sergio Morán Junco solo tuvo que tocarla a los 41', cuando se encontró solo de cara al arco, para poner un 2-2 que era casi un K.O. para Pumapuquio. Peor aún cuando a los 44', luego de un córner, se vio arrinconado a una esquina, contra las cuerdas. El gigante Gienko Vásquez Luna de cabeza recogió un rebote, de cabeza también y puso el 3-2.
SEGUNDO FRÍO
Los visitantes se estaban llevando todo de La Molina, y coincidentemente, mientras el sol iba poniéndose y daba paso al frío, supieron que era momento de bajar la carga, esperar y enfriar el partido.
El Progreso Pumapuquio tenía que salir a proponer sí o sí. No había de otra. Y todo el segundo tiempo fue un solo de intentos rosados. Pero ninguno tenía éxito.
El DT sentía que se le escapaba todo de las manos a su equipo. La valla era alta. Pero el honor también juega y a veces es más valioso que una clasificación.
Así pudieron conseguir el empate de penal por intermedio de Carlos Peralta (85'), pero no pudieron más y para ellos fue una pena máxima. El Estudiantil Ascope supo aprovechar su ventaja, y en los contragolpes pudo hacer que llueva sobre mojado.Y llegó el final, con el sol ocultándose, los jugadores siendo felicitados por sus familiares. Con la imagen de vencedores y vencidos en el campo, aunque con la satisfacción de haber visto un partidazo, donde uno consiguió su objetivo de clasificar, pero donde el otro puede haberse quedado tranquilo por haber dado todo.
ALINEACIONES
Sport Progreso Pumapuquio (3): José Castro; Renzo Huamán (Henry Huamán), Marco Lozano, Cristhofer Lara (Juan Astete), Germán Enciso; Juan Gargate, Alfredo Gutierrez, Gavino Quispe, Erick Sánchez; Carlos Peralta, Aldo Huamán. DT: Alfredo Gutierrez.
Estudiantil Ascope (3): Rodolfo Vargas; Juan Tirado, Johnny Casas, Miguel Álvarez, Juan Peña (Aldair Botta); Renzo Angulo, Johan Macahuachi, Sergio Morán, Edward Riega (Miguel Ponce); Kenny Quique, Gienko Vázquez (Jonathan Silupú). DT: Rene Peña.
ÁRBITRO: Jesús Castro.
ESCENARIO: Estadio Municipal - MUSA (La Molina).
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Por: Adhemir Cavero Chavera
Fotos Exclusivas de Tribunal Deportivo
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