El pasado miércoles fue presentado como nuevo técnico de la selección peruana de fútbol el ex asistente de Sergio Markarián, Pablo Bengochea. En medio de un clima negativo por parte del aficionado, el uruguayo firmó un contrato que solo lo liga con la FPF hasta finalizar la Copa América del próximo año.
La principal razón por la que no hay expectativa en la afición y en gente relacionado con el fútbol, es porque este nuevo entrenador viene del proceso anterior. Y bueno, este tuvo más resultados negativos que positivos. Hablo en términos generales porque no deseo ahondar en que tipos resultados hubieron, debido a que es historia pasada.
Otro tema en cuestión es lo tan rápido que se eligió al entrenador. Supuestamente, la FPF había tenido un acercamiento con Marcelo Bielsa para que sea el sucesor del uruguayo Markarián. No se sabe si el acercamiento fue mediante terceras personas o la misma Federación lo hizo, pero con solo mencionar el nombre de Bielsa encendieron la llama de la esperanza en el peruano de a pie.
Sin embargo, la FPF publicó un comunicado donde mostraban la respuesta negativa de Marcelo Bielsa. El popular ‘loco’ agradecía que se hayan fijado en el pero no aceptaba el cargo. Veinte minutos después aparecía un comunicado de la misma FPF indicando que ya tenían el nombre del nuevo entrenador. El nombre generaba indignación en las personas: Pablo Bengochea. La gente entendía que nunca se interesaron en Bielsa y el que siempre tuvo la aceptación de los dirigentes de la Federación fue el ex 10 de la selección uruguaya. Si Bielsa era el objetivo de la FPF y este no aceptaba hubieran ido a la carga de técnicos con la mentalidad ‘bielsista’. Díganse Ahmed, Vivas, Sampaoli (este si era difícil), Berizzo y tantos que existen en el mundo del fútbol.
Viendo cómo está el clima post presentación Bengochea, es muy difícil que el aficionado cambie de parecer. Se le vienen dos partidos amistosos difíciles contra Inglaterra y Suiza y por el bien de la selección esperemos que le vaya bien y que deje el nombre del país en alto. El mismo entrenador ha dicho que con victorias se puede cambiar la opinión de los hinchas. “A la gente no hay que decirle nada, pues si gana se alegra y si pierde está triste. Hay que demostrarle con hechos”.
Por André Salas
Comentarios
Publicar un comentario