COMBINADO DE DEPORTIVO MUNICIPAL Y ALIANZA LIMA GOLEA 4 - 1 AL BATERN MUNICH (FOTOS DE AQUELLOS AÑOS)
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“Fútbol de fiesta y fiesta de fútbol. Nunca el público aplaudió con tantas ganas y tal vez pocas veces tuvo tantas oportunidades para aplaudir, inclusive poniéndose de pie para hacerlo, como pretendiendo darle mayor fuerza a la exteriorización que era al mismo tiempo de aprobación y alegría. Y la verdad es que los destinatarios lo merecieron en todo momento; todos sin excepción. Porque el combinado local (…) impresionó como una avasalladora fuerza de conjunto.” (El Comercio, 8 de enero de 1971)
Durante el verano de 1971, Lima se convirtió por una semana en el fugaz destino de grandes astros del balompié mundial. Fue por el torneo amistoso realizado en el Estadio Nacional que el Perú recibió las gratas visitas del poderoso club alemán Bayern Münich, dirigido por el múltiple campeón Udo Lattek, en el que sobresalían Franz “el Kaiser” Beckenbauer _considerado el mejor jugador alemán de la historia_, Gerd “el bombardero” Müller _máximo goleador alemán de la historia_ y Sepp “el gato” Maier _uno de los mejores porteros alemanes de la historia_, El otro invitado de lujo fue nada menos que el Benfica portugués del legendario Eusebio “la pantera de Mozambique”.
El tercer equipo participante fue un combinado conformado en su mayoría por jugadores de Alianza Lima y Deportivo Municipal dirigidos por la dupla Jaime de Almeida y Roberto Drago. En este combinado destacaban nítidamente Hugo “el Cholo” Sotil y Teófilo “el Nene” Cubillas. El Bayern Münich llegaba con sus máximas figuras procedente de Argentina tras perder ante la selección local por 4-3 y cumplió dos presentaciones en el Perú: la primera ante Universitario, el martes 5 de enero, y la segunda ante el combinado Alianza-Muni, el jueves 7 de enero. A su llegada al aeropuerto sorprendió la sencillez y buen humor de los alemanes quienes se mostraron en todo momento complacientes con la prensa peruana incluso gastándose bromas con los reporteros presentes. Coincidieron en que guardaban un profundo respeto por el futbol peruano luego de ver la destacada participación incaica en el mundial mexicano.
Las expectativas del público peruano eran amplias pues querían ver en acción a las estrellas mundialistas de la selección alemana que quedó tercera en el mundial mexicano en esa gloriosa década para el futbol alemán. El primer duelo de los alemanes en suelo patrio fue el meritorio empate a dos logrado por Universitario, en una sensacional noche de los cremas que con mucha inspiración y juego vistoso lograron una gran resistencia frente al poderoso cuadro alemán. Marcaron para los limeños Oswaldo “Cachito” Ramírez a los 16’ y 23’ min. del primer tiempo y para los teutones Gerd Müller a los 20’ y 12’ min. del segundo tiempo. En la segunda y más esperada presentación de los muniqueses, esta vez ante el combinado limeño _en un Estadio Nacional totalmente abarrotado con más de cuarenta mil almas deseosas de ver un encuentro de gran nivel_ la sorpresa la volvieron a dar los peruanos quienes literalmente dieron un baile al golearlos por 4-1, en otra épica jornada para el futbol peruano, noche donde el futbol estuvo de fiesta y la fiesta la puso el futbol de los endiablados “Nene” Cubillas y el “Cholo” Sotil debido al perfecto entendimiento que se tuvieron en el campo.
En un discreto y equilibrado primer tiempo fueron los locales los que tomaron la iniciativa de las acciones aprovechando la solidez defensiva mostrada por los zagueros peruanos. Acabó esta etapa con la ventaja parcial peruana de 1-0 con anotación de Guzmán en el min. 38, en una gran jugada previa de “Perico” León y Julio Baylón. La historia del partido daría un giro repentino en una inolvidable segunda parte donde el dúo de oro Sotil-Cubillas estuvo inspirado y en una formidable performance consigue anotar 3 goles más por obra de Cubillas en dos ocasiones, a los 10’ y 17’ min., y “Perico” León en el min. 38; descontando Ey a los 29’ min. para los alemanes. Según los medios de la época, la fiesta de los aficionados que se vivió aquella noche en el coloso limeño fue indescriptible debido a las genialidades que mostró el habilidoso y pinturero ataque peruano haciendo del triunfo una justa, contundente e irrefutable goleada.
Al final, los teutones reconocieron hidalgamente su derrota y la superioridad del juego peruano evidenciada a lo largo del encuentro. La afición limeña no se reponía aún de la borrachera producida por aquella épica goleada ante el Bayern Münich cuando una semana después el combinado Alianza Muni recibía nada menos que al Benfica portugués que había llegado a este mini-torneo con su máxima estrella, el goleador Eusebio, pero esa ya es otra historia.
Fuentes; Fotos y Texto: Ernesto Miguel / http://historiatradicionyfutbol.blogspot.com
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