No hay mentira que dure cien años ni futbolista que lo resista. El plantel de Alianza Lima está en pie de lucha… Ayer, cansados de las promesas incumplidas de su presidente Guillermo Alarcón, no entrenaron.
La historia comenzó el martes por la tarde. El equipo debía realizar un amistoso con César Vallejo en Trujillo y los íntimos acordaron no subir al avión si no les daban parte de sus haberes. Luego de largas conversaciones con el titular, cedieron en su postura con el compromiso que al día siguiente, a primera hora, se les abonaría sus sueldos. Como era lógico, perdieron el vuelo y tuvieron que alquilar un chárter para trasladarse a la “Ciudad de la eterna primavera”.
Los sorprendente es que ayer no hubo ningún depósito en las cuentas de ahorros de los futbolistas y eso generó un malestar de tal magnitud que ninguno asistió al almuerzo por los 111 años de fundación del club.
Pero hubo algo más increíble. En el agasajo, el mandatario fue claro.“A los jugadores se les ha pagado un mes gracias a un importante ingreso económico”, sostuvo.
Horas después, José Soto y sus pupilos tenían que trabajar a las 4 de la tarde en Matute, pero los ánimos estaban caldeados. Mientras debatían, se esperaba que a las 7 de la noche pisen el campo, pero finalmente decidieron no trabajar como señal de protesta.
Trome
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